El Senasa informó que se obtuvieron resultados positivos a alphavirus -encefalomielitis equina del Oeste- en muestras procesadas por el INTA, en la provincia de Entre Ríos, Isla ibicuy, Medanos, y los Conquistadores, Federación; y en la provincia de Corrientes, Esquina. Las mismas fueron procesadas por el Instituto Vanella de la Universidad Nacional de Córdoba, en equinos con síntomas nerviosos y mortandad.
Hasta el momento, se han confirmado un total de 89 brotes positivos, contabilizando 10 por diagnóstico de laboratorio y 79 por diagnóstico clínico (por sintomatología y nexo epidemiológico). Asimismo, las provincias donde se han registrado los brotes, a la fecha, son Buenos Aires, Chaco, Corrientes, Córdoba, Santa Fé y Entre Ríos.
Vale destacar que todos los establecimientos que notificaron signos nerviosos y/o mortandad de equinos se encuentran sometidos a interdicción oficial con restricción absoluta de movimientos. Asimismo, el Senasa dio también intervención al Ministerio de Salud de la Nación y a las autoridades locales con los que se trabaja en forma articulada.
La entidad sanitaria descartó que, dentro de los establecimientos involucrados con equinos con resultado positivo de la enfermedad o sospecha clínica, existan otras especies, que no sean équidos, que presenten sintomatología compatible con EE.
Sintomatología
Dentro de las encefalomielitis equinas existen Este, Oeste y Venezuela. Estas son enfermedades exóticas para el país, siendo el último registro oficial de Encefalomielitis del Oeste (EEO) en 1988. La Encefalomielitis Equina Venezolana (EEV) nunca estuvo presente en nuestro país y así se declara ante la OMSA.
La tasa de letalidad (el porcentaje de equinos muertos sobre los que se enferman) puede llegar al 90 por ciento para EEE y entre 20 a 30 por ciento para EEO, el resto puede convalecer y quedar con secuelas en algunos casos. En el caso de la EEV, la tasa de letalidad es muy variable, del 40 a 90 por ciento. También pueden quedar secuelas en los equinos que convalecen.
Esta enfermedad viral se transmite de las aves a los mosquitos, y éstos a su vez infectan a los equinos y seres humanos. El período de incubación de la enfermedad -es decir el tiempo que pasa desde la infección hasta que aparecen los signos clínicos- es de 5 a 14 días.
Se han confirmado un total de 89 brotes positivos, contabilizando 10 por diagnóstico de laboratorio y 79 por diagnóstico clínico.
Todos los establecimientos que notificaron signos nerviosos y/o mortandad de equinos se encuentran sometidos a interdicción oficial con restricción absoluta de movimientos.
Los equinos presentan un cuadro neurológico con diferentes signologías, como deambulaciones, hiperexcitacion, depresión, hipertermia y decúbito principalmente.
Control, prevención y recomendaciones
- El control de mosquitos. Es fundamental para evitar la diseminación de la enfermedad y el contagio a los equinos y las personas. Tener en cuenta la aplicación a los animales y en el ambiente, de productos autorizados por el Senasa.
- La vacunación de los equinos contra esta enfermedad. Para ello el Senasa está coordinando con las cámaras de Productos Veterinarios de forma tal de tener disponibilidad y distribución de la mayor cantidad de vacunas en el menor tiempo posible.
- Notificar inmediatamente al Senasa ante la presencia de signos nerviosos en equinos.
- Disminuir al mínimo posible los movimientos de equinos.
- Evitar las concentraciones o eventos que impliquen concentración de equinos.
- Completar el calendario de vacunación de los equinos.
Asimismo, se convoca a los distintos actores relacionados a la producción y la sanidad equina a fortalecer y profundizar la revisión clínica periódica de los equinos, extremar las medidas de bioseguridad, evitando el movimiento de animales y personas entre caballerizas y establecimientos y aplicar medidas de higiene y desinfección con especial atención al manejo de artrópodos como posibles vectores de la enfermedad.
FUENTE: Senasa