Con una marcada prevalencia y en lo que se considera un caso inédito, surgió un brote de Aujeszky en porcinos, en el centro-norte de Santa Fe, que mantiene en alerta al sector ante el riesgo de una propagación de la enfermedad hacia el norte de la provincia.
Además, preocupa el impacto que pueda generar no sólo en las granjas, sino en el estatus sanitario argentino respecto de los mercados porcinos externos.
Según fuentes de MOTIVAR, el episodio se dio en la pequeña localidad de Emilia, en el departamento La Capital, ubicada sobre la ruta provincial 62, a 2 kilómetros de la ruta nacional 11, al norte de la capital local. Las actividades económicas de esta comunidad de poco más de mil habitantes se basan en la lechería, ganadería, la cría de porcinos y la agricultura.
El caso “se salió” del área donde históricamente se reportó la presencia de la enfermedad, circunscrita al suroeste de Santa Fe y al sureste de Córdoba, donde está debidamente controlada, especialmente en las pequeñas granjas que presentan un menor estatus de bioseguridad que las grandes productoras.
El caso "se salió del área donde históricamente se reportó la presencia de la enfermedad, circunscrita al suroeste de Santa Fe y al sureste de Córdoba, donde está debidamente controlada
Sin embargo, el primer dato llamativo es que la enfermedad, que afecta a cerdos domésticos y silvestres, entre otros animales, y que está presente en distintas zonas de la Argentina, comenzó a aparecer precisamente en grandes granjas del país ya hace varios meses, en contradicción con aquel preconcepto.
De allí que el gobierno nacional autorizó la importación extraordinaria de 1,2 millón de vacunas contra Aujeszky de las cuales al menos sólo unas 300 mil efectivamente habrían ingresado al país, de acuerdo a datos oficiales. De todas maneras, el acto revela la magnitud de la situación.
Inédito y prevalente
Tamaña sorpresa se llevó el laboratorio de diagnóstico veterinario, a cargo de analizar las muestras tomadas en el establecimiento afectado de Emilia, al confirmar el diagnóstico positivo de Aujeszky. Tal es así que habría hecho una segunda evaluación, porque “no salían de su asombro. En más de 20 años de trayectoria que tiene este laboratorio, jamás se le había presentado un caso”, dijo una fuente cercana a MOTIVAR.
Otro factor que también sorprendió a los profesionales intervinientes es “la prevalencia detectada en la granja afectada. Esto da cuenta de que es una enfermedad nueva en la zona, que se dio de golpe, y que se desparrama muy rápido”, advirtió la fuente consultada.
Trascendió que dentro de una población de 120 cerdos que tiene la granja en cuestión, se tomaron muestras de sangre a 60, de los cuales 56 dieron positivo para Aujeszky. Así de prevalente.
Dentro de una población de 120 cerdos que tiene la granja afectada, se tomaron muestras de sangre a 60, de los cuales 56 dieron positivo para Aujeszky.
“No es una enfermedad que estaba en la granja y no la encontraban, sino que por la prevalencia, por la cantidad de positivos que hay, demuestra que la enfermedad está activa y que se contagió hace poco”, alertaron a este medio.
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Botón de alerta al Senasa
El caso fue debidamente denunciado por el veterinario interviniente al sistema de alerta del Senasa, que ya está trabajando en el caso.
Parte de ese trabajo es determinar el origen de este brote, además de la aplicación de un plan de saneamiento, máxime teniendo en cuenta que a pocos kilómetros de la granja afectada está el establecimiento porcino de una importante empresa alimenticia, que desde ya, ante lo ocurrido, está reforzando los controles sanitarios.
El caso fue debidamente denunciado por el veterinario interviniente al sistema de alerta del Senasa, que ya está trabajando en el caso.
Al cierre de esta publicación, al caso de Aujeszky en Emilia no se le ha sumado ningún otro en el centro-norte de Santa Fe.
¿Qué es la enfermedad de Aujeszky?
La enfermedad de Aujeszky, -o Seudorrabia-, afecta a muchas especies (excepto a humanos y primates) y el cerdo es particularmente sensible. Además los porcinos son considerados huéspedes naturales actuando como reservorios y fuente de infección para otros animales susceptibles.
La enfermedad es causada por un herpesvirus que puede permanecer latente causando graves pérdidas económicas y su erradicación es difícil y costosa.
El virus puede permanecer latente en el tejido nervioso del cerdo durante largos períodos de tiempo y entonces reactivarse. Una vez que se ha introducido en una granja, normalmente persiste en ella y puede afectar continuamente la eficiencia productiva a diferentes niveles.
Los signos clínicos y la presentación de la enfermedad en los cerdos varían según la cepa y la carga viral, la edad y el estado inmunitario de los animales afectados, entre otros factores.
Frecuentemente, una vez superada la fase clínica de la enfermedad, los animales convalecientes permanecen en estado de latencia. El virus puede sobrevivir hasta tres semanas fuera del cerdo. Y se producen brotes agudos de la enfermedad cuando una cepa virulenta infecta por primera vez una granja susceptible, no vacunada.
Impactos
La presencia del virus en la población porcina de un establecimiento afecta a la producción en forma directa por las fallas reproductivas, mortandad de lechones y enfermedad respiratoria y, de manera indirecta, por restricciones a los movimientos de animales y al comercio nacional e internacional, la obligación o necesidad de eliminar reproductores infectados y el aumento de los costos.
Los gastos que acarrea la erradicación de la enfermedad incluyen diagnósticos serológicos individuales y periódicos, la eliminación de portadores y reemplazo por animales libres, la eventual utilización de vacunas o, en caso de corresponder, el despoblamiento-repoblamiento de la granja, medidas que implican una inversión significativa.
Otras especies afectadas
El virus de Aujeszky puede afectar a otras especies que normalmente no lo transmiten, incluyendo vacas, caballos, perros y gatos; pero que muestran síntomas nerviosos y mueren. No afecta a los humanos.