Con un auditorio colmado en la Sociedad Rural de Villa María, se llevó adelante el primer encuentro de la Comisión Técnica de Bienestar Animal del Comité Nacional de la Federación Internacional de Lechería (FIL). La jornada se dio en el marco de la Mega Expo del Centro Argentino (MECA 2025) y contó con la participación destacada del especialista chileno Enrique Bombal, referente global de la entidad y asesor técnico de la empresa DeLaval.
Bombal ofreció una charla introductoria que abarcó desde conceptos clave hasta recomendaciones específicas para que la Argentina ordene y capitalice las iniciativas que ya están en marcha en materia de bienestar animal.
Un nuevo paradigma productivo
En un escenario global donde 800 millones de personas padecen hambre, el sector lácteo cobra un rol estratégico: la leche y sus derivados aportan 18 de los 22 nutrientes esenciales para la vida humana. A la vez, la actividad enfrenta desafíos crecientes: mayores exigencias, incremento de los costos laborales y necesidad de una digitalización que garantice eficiencia.
Dentro de este contexto, el bienestar animal se posiciona como uno de los ejes principales de la sostenibilidad. Lejos de ser un concepto aislado, hoy forma parte de un enfoque integral conocido como One Welfare, que vincula el bienestar animal con el ambiental y el humano.
“El bienestar animal es parte de la sostenibilidad, sin eso no hay futuro productivo”, aseguró Bombal.
Ciencia, ética, legislación y manejo
La FIL promueve un abordaje del bienestar animal basado en evidencia científica, consenso global y marcos regulatorios. ¿Qué implica esto en la práctica? Garantizar una nutrición adecuada, buena salud, confort físico y térmico, evitar el dolor y el estrés, y permitir que los animales expresen sus comportamientos naturales.
“Un buen manejo del ganado, prácticas de cría responsables, un ambiente físico apropiado y una gestión robusta de la salud son acciones que, bien aplicadas, promueven todos estos objetivos”, detalló Bombal, al tiempo que remarcó la importancia de abrir las tranqueras y mostrarle a la sociedad cómo se trabaja en los tambos.
Medir para mejorar
El bienestar animal no solo es una exigencia ética. También impacta directamente en la productividad, por ejemplo, reduciendo el uso de antimicrobianos. “Se puede medir. Se puede gestionar. Y se puede mejorar”, resumió el especialista, alentando el uso de indicadores directos e indirectos.
Al cierre del evento, Alejandro Palladino lideró la primera reunión abierta del Comité Técnico, donde se trabajaron en grupos temas clave como la salud animal (mastitis y problemas podales), estrés térmico, manejo del dolor, relación vaca-ternero, vínculo humano-animal y alimentación.
¿Qué sigue?
Durante el trabajo en el Patio Lechero de la MECA 2025, se establecieron las primeras líneas de acción para adaptar las propuestas de FIL al contexto nacional. La Argentina empieza así a articular una estrategia que combine productividad, sostenibilidad y bienestar animal con visión de largo plazo.
FUENTE: TodoLechería