Brasil se convirtió en el primer país de Sudamérica en regular la aplicación de cannabis en veterinaria, más puntualmente en animales de producción. La Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria (ANVISA) dio luz verde para que los veterinarios receten productos a base de cannabis a especies ganaderas, una medida que promete revolucionar el sector agrícola.
Este avance regulatorio permite el uso de cannabinoides como el cannabidiol (CBD) en tratamientos destinados a mejorar el bienestar animal, reducir el estrés, y hasta optimizar la conversión alimenticia en animales de granja.
El cannabis sativa, especialmente sus derivados ricos en CBD, mostró beneficios significativos en tratamientos antiinflamatorios y analgésicos, que resultan de gran ayuda en tratamientos para manejar el dolor y el estrés de los animales de producción, como cerdos, aves y vacas.
Cannabis y bienestar animal
Según la nota publicada en Meteored, los cannabinoides no sólo alivian el sufrimiento físico, sino que ayudan también a manejar el comportamiento, generando un ambiente más tranquilo en entornos de crianza intensiva, como el transporte o el confinamiento. Así, la aplicación de CBD en situaciones de alto estrés mejora la salud animal y, como beneficio adicional, el rendimiento productivo de los animales.
La ANVISA, en colaboración con el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAPA), actualizó la Ordenanza 344, estableciendo una normativa que regula la prescripción y comercialización de productos a base de cannabis. Los veterinarios ahora pueden recetar medicamentos basados en cannabinoides, que ya pasaron por un riguroso proceso de importación y registro sanitario.
Caroline Campagnone, del Consejo Federal de Medicina Veterinaria de Brasil, explicó que esta regulación es "una extensión lógica y necesaria" que permite un enfoque terapéutico natural en el cuidado animal. En su opinión, el uso de cannabinoides representa una alternativa viable y menos agresiva que otros medicamentos tradicionales.
Una alternativa
Uno de los aspectos clave de esta regulación es su potencial para reducir la dependencia de antibióticos, ya que ciertos cannabinoides poseen propiedades antimicrobianas, eficaces contra patógenos comunes como Staphylococcus aureus y Escherichia coli, presentes en ambientes de cría intensiva. En un contexto donde la resistencia bacteriana es una preocupación creciente, los cannabinoides ofrecen una opción para controlar infecciones sin los efectos secundarios de los antibióticos.
Además, se comprobó que el CBD puede estimular el apetito y mejorar la conversión alimenticia en especies como los cerdos. Esto no solo impulsa la eficiencia productiva, sino que también promueve una producción más saludable, con carne de mejor calidad y animales menos estresados.
Los veterinarios podrán utilizar productos a base de cannabis como alternativa terapéutica para el manejo del dolor, la inflamación y otras afecciones.
A pesar de sus beneficios, el uso de cannabis en ganadería requiere una administración responsable y controlada. Los veterinarios deben evaluar la dosis adecuada y tener en cuenta las interacciones con otros medicamentos, ya que una sobredosis de cannabinoides podría causar efectos adversos, como cambios de comportamiento o problemas respiratorios en los animales.
FUENTE: Meteored