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SUSCRIBITEBuena parte de esta disminución en la producción ganadera tiene que ver con la reducción en la ganancia de peso de los animales a raíz de los parásitos.
Un estudio publicado recientemente por la Revista Brasileña de Parasitología Veterinaria indica que parásitos como gusanos, garrapatas, moscas de los cuernos y moscas pueden causar pérdidas de hasta 70 mil millones de reales por año a la producción ganadera de Brasil.
Estas pérdidas se deben principalmente a una reducción de hasta un 20% en la ganancia de peso de los animales a raíz de los parásitos.
Lo más preocupante es que más del 90% de los gusanos son subclínicos, sin signos aparentes y difíciles de detectar por los productores.
Se estima, por ejemplo, que el 95% de las garrapatas se encuentran en los pastos, situación que requiere una atención especial por parte de los ganaderos.
En estos casos, la única alternativa es el tratamiento preventivo, realizado mediante un control de parásitos estratégico según la realidad de la explotación.
Las industrias asociadas a Sindan (cámara de laboratorios veterinarios brasilera) trabajan en el desarrollo de endectocidas innovadores, más eficientes y seguros, que proporcionen mayor bienestar animal y ganancias de productividad a los ganaderos.
“Es importante recalcar que cualquier tratamiento debe ser guiado por un veterinario”, sostuvieron desde el país vecino.
Durante la pasada edición de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP28), representantes de Brasil anunciaron un objetivo agresivo de reducir las emisiones hasta en un 53% para el año 2030, objetivo que debe alcanzarse con la colaboración del sector agrícola, mediante la adopción de tecnologías y el aumento también de la productividad en el campo.
Aún poco reconocido como solución de sostenibilidad, el sector de salud animal jugará un papel decisivo en este proceso de transformación, ya sea a través de la prevención de enfermedades o del tratamiento de posibles enfermedades, no sólo en Brasil sino también en otros países productores de carne, huevos y leche.
Según distintos estudios internacionales, las enfermedades en el ganado provocan un aumento de las emisiones de Gases de Efecto Invernadero de hasta un 113% en la ganadería de carne y un 24% en la producción de leche.
"Una mayor adopción de buenas prácticas en materia de salud y ganadería permitirá una expansión considerable de la producción de proteínas sin aumentar los niveles de emisiones de gases de efecto invernadero", afirmó Emilio Salani, vicepresidente ejecutivo de Sindan en medios digitales.
Desde la entidad explicaron que se estima que, en Brasil, un aumento del 1% en la vacunación del ganado vacuno corresponde a un aumento del 0,7% en la producción.
“La vacunación y el tratamiento de los animales también son importantes en el concepto de una sola salud. Los patógenos pueden transmitir enfermedades a poblaciones vulnerables y a animales domésticos, como hemos visto con el Covid-19", agregó el ejecutivo del Sindan.
Y completó: "Existe una clara conexión entre las personas, los animales y el medio ambiente. Es por esto que necesitamos incrementar todos nuestros esfuerzos para mejorar la salud animal”.
