Si bien desde 2019 y por medio de la Resolución 1698, el Senasa establece la posibilidad de que los rodeos bovinos incorporen caravanas electrónicas oficiales como alternativa a las convencionales, promediando marzo fue la Mesa de las Carnes la que publicó en la diario La Nación un comunicado solicitándole al ente sanitario que avance en una mayor implementación de esta tecnología.
Frente a esto y a través de las entrevistas que realizamos los martes a las 16 horas desde la cuenta de Instagram @motivarok, tomamos contacto con Sebastián Gigena, quien es gerente de Nuevos Desarrollos en Villa Nueva. ¿Por qué? Porque la firma radicada en Villa María, Córdoba, es representante en nuestro país tanto de los equipos de monitoreo, como de las caravanas de Allflex, compañía global que abarca el 70% de la identificación a nivel mundial y el 80% de la que se realiza de manera electrónica.
Los interesados en ver la entrevista completa pueden dirigirse a la sección MOTIVAR Live en www.youtube.com/pmotivar o escanear el Código QR que complementa este artículo para acceder de manera directa.
El “pedido” de la Mesa de las Carnes fue claro: poner en marcha el uso de un chip electrónico en cada vacuno para reforzar la trazabilidad con foco en los mercados internacionales. Destacando que la medida tiene lógica en relación con lo que ocurre en todo el mundo, Gigena insistió en que los productores que quieran, ya pueden incorporar esta tecnología de manera oficial y optativa.
“El mercado necesita saber cada vez con mayor precisión qué se consume y poder trazar esa información en el caso de surgir un problema. Eso sumado no solo a lo que serán las exigencias de los compradores en materia de seguridad alimentaria, sino también a la posibilidad de mejorar la gestión y el manejo de los rodeos bovinos”, indicó Gigena. Más allá de esto y en relación con la Resolución 1698, nuestro entrevistado agregó: “Se plantea una alternativa a los dispositivos que ya se emplean. La disposición habla de identificación y reidentificación; con lo cual los productores que ya tengan sus animales identificados con los dispositivos anteriores a esta normativa (visuales) pueden incorporar una caravana electrónica reforzando su esquema de trabajo”.
Según Gigena, las caravanas electrónicas dan la posibilidad de generar un sistema más sólido de trazabilidad y de individualidad. “En un campo con 500 madres, podremos ver cuál tiene un problema para tratarla y dejar a las restantes 499 tranquilas. Esto tiene un alto impacto productivo, así como en el bienestar de los animales y de las personas que trabajan día a día con ellos”, reforzó.