La Red de Veterinarios en Catástrofes brinda una serie de pautas fundamentales para el abordaje sanitario de los animales durante situaciones de emergencia, destacando la necesidad de ajustar protocolos habituales para priorizar la contención de riesgos zoosanitarios y el bienestar animal.
La MV Adriana Noacco, integrante de la Red, subraya la importancia de que los equipos vinculados a zoonosis mantengan un estado de alerta durante estas circunstancias. La alteración del entorno, el desplazamiento forzado de animales y personas, la exposición a condiciones insalubres y la falta de recursos básicos pueden derivar en un aumento significativo de enfermedades zoonóticas, como leptospirosis, rabia, hantavirosis, entre otras.
Campañas de control poblacional
En estos escenarios críticos, uno de los lineamientos más importantes es la suspensión temporal de las actividades de control poblacional, tales como castraciones masivas. Esta decisión busca:
- Evitar riesgos quirúrgicos innecesarios: La falta de condiciones sanitarias adecuadas incrementa las probabilidades de complicaciones postoperatorias, como infecciones, dehiscencias o manejo inadecuado de heridas.
- Reducir el estrés animal: El contexto de emergencia ya representa un factor estresante significativo para los animales. Someternos a procedimientos invasivos puede agudizar alteraciones conductuales y comprometer su recuperación.
- Redirigir recursos humanos y materiales a tareas de mayor urgencia, como la vigilancia epidemiológica, el monitoreo de enfermedades zoonóticas y el asesoramiento a refugios temporales o centros de evacuación que alberguen animales.
“En estas situaciones, el rol del veterinario cobra una dimensión estratégica, no solo en la atención clínica, sino también en la prevención y mitigación de riesgos para la salud pública”, destaca Noacco.
Atención del bienestar animal
La reactivación de las campañas de esterilización debe programarse una vez que se haya declarado el retorno a la normalidad en la comunidad afectada. Esto implica que los factores de riesgo ambiental se encuentran controlados y que las condiciones básicas para un abordaje seguro están garantizadas.
Desde el Colegio de Veterinarios de Buenos Aires, acompañan y respaldan este tipo de recomendaciones que permiten actuar con responsabilidad, priorizando tanto la salud pública como el bienestar animal. Y refuerzan "la importancia de contar con profesionales veterinarios debidamente capacitados en gestión de emergencias, como parte esencial de los equipos interinstitucionales de respuesta ante desastres".
FUENTE: CVPBA