La tricomonosis bovina (TG), ex tricomoniasis genital bovina, es una de las enfermedades venéreas que afectan a la reproducción, y se la conoce como la parasitosis que “achica los rodeos”. Tiene un tratamiento específico en Argentina de la mano del Laboratorio Biológico de Tandil SRL (BIOTANDIL), con su vacuna TRICOVAC, posibilitando controlar y trazar un plan preventivo contra esta patología.
En diálogo con MOTIVAR, el MV tandilense Guillermo Etchanchu, contó una de sus experiencias exitosas con TRICOVAC, en particular, en un rodeo de unos 220 animales de raza Angus en la zona de Rauch, donde se diagnosticó la TB.
“El campo venía con porcentajes normales de preñez, de alrededor de un 92% o 93%. En 2018 se ingresó hacienda nueva, vacas de cría ya hechas, y al año siguiente la tasa de reproducción cayó al 72%. Nos dimos cuenta a partir de los tactos. Empezamos a tomar muestras, las mandamos a analizar y en los toros dio positivo para tricomonosis”, recordó el médico veterinario.
En consecuencia, y dado que “los toros no eran nuevos", se resolvió descartarlos y vacunar a todos los animales con TRICOVAC. Al año siguiente ya se había recuperado la tasa de preñez otra vez al 92%, es decir, se volvió a los niveles normales.
Desde entonces, Etchanchu continuó vacunando ese rodeo de Rauch con Tricovac y asegura “no haber tenido más problemas de baja de preñez, ni toros enfermos después de haber descartado a los anteriores”. Estas aplicaciones a modo preventivo con la vacuna contra TB de BIOTANDIL (www.biotandil.com.ar) “se tomaron como norma en este campo de Rauch y se extiende a todo su rodeo”, afirmó el profesional.
“Antiguamente se consideraba que con dos o tres celos la vaca se podía ‘limpiar’ de la tricomonosis. Si bien en algunas hembras la duración de la infección puede ser entre 2 a 4 meses, en otras hembras puede suceder que la persistencia llegue hasta los 22 meses. Esta condición de vaca portadora tiene un fuerte impacto epidemiológico para el manejo sanitario del rodeo, transformándose en una fuente de infección para el próximo período reproductivo. Con esta vacuna nos aseguramos la inmunidad, porque los resultados son evidentemente muy buenos”, remarcó Etchanchu.
El protocolo que el MV aplica en este caso en particular se basa en vacunar tanto a las vacas, vaquillas y toros, antes del servicio.
Para lograr una buena inmunidad anual preventiva, el prospecto de la vacuna indica aplicar dos dosis de 5 mililitros cada una por vía subcutánea a vacas y vaquillonas, antes del entore, con el siguiente intervalo: primera dosis 40 días antes del servicio, y segunda dosis 20 días antes del servicio. Se debe repetir anualmente y se recomienda hacer un control veterinario de los toros.
Prevenir antes que curar
“TRICOVAC es un producto que lo usan en distintas regiones, pero que generalmente se aplica cuando la enfermedad ya está instalada. Por ello, es necesario un programa de control y desde el laboratorio propiciamos que en el protocolo de vacunación sea incluido como un elemento más en la lista, para proteger al rodeo y generarle un manto inmunológico frente a la tricomoniasis, con una altísima probabilidad de controlarla”, señalaron los Dres. Pedro Soto y Enrique Lucchesi, fundadores de BIOTANDIL.
“Nosotros en el laboratorio hacemos diagnósticos y nuestros clientes que manifestaron tener el problema, comenzaron a utilizarla vacuna y hace años que están sin venéreas. Por supuesto que lo lograron implementando un programa sanitario sistémico con un trabajo continuo y objetivos claros”, aseguraron los profesionales.
Los responsables de BIOTANDIL, destacaron la calidad de TRICOVAC, que es una vacuna monovalente a protozoarios inactivados con la cepa 6655 de BIOTANDIL y comentaron que para su elaboración es preciso separar el microorganismo, concentrarlo en la medida justa y llevarlo a una dosis ideal. El producto lleva un adyuvante oleoso cuyo componente es importado, de excelente calidad, y por ello no genera respuesta inflamatoria o abscesos.
Asimismo, los fundadores de BIOTANDIL enumeraron casos de éxito y remarcaron la utilidad de TRICOVAC a la hora de inmunizar rodeos que tienen servicio estacionado o todo el año. Asimismo, se hizo hincapié en la importancia de tener diagnósticos precisos de cuáles enfermedades de la reproducción afectan al rodeo.
Por último, los responsables de BIOTANDIL comentaron que la comercialización de la vacuna la realiza directamente desde la empresa, y que su objetivo es “mejorar la distribución de Tricovac, con mayor llegada a distintos puntos del país”.
Inédita
A BIOTANDIL se le atribuye el desarrollo de la primera vacuna nacional y América Latina contra la tricomonosis bovina y la comprobación de su eficacia en condiciones de campo.
DJI_0182-Recuperado4-2.jpg
Esta enfermedad que “achica los rodeos” afecta seriamente a la reproducción. Es transmitida por el toro a la hembra durante la monta natural, debido a que el toro infectado tiene colonizado el prepucio y la mucosa peneana con el Tritrichomonas foetus, sin causar manifestaciones visibles, resultando así un portador asintomático.
En las hembras, la infestación primaria se ubica en la vagina, cuello uterino y el útero, afectando todo el tracto reproductor, produciendo infecundidad, abortos entre el tercer y el quinto mes de la gestación, piómetras y una marcada repetición de celos por muerte embrionaria. En consecuencia, la tricomonosis produce gran perjuicio económico por la elevada reducción de los índices de preñez, daño que puede superar un 50% en vaquillonas y algo menos en vacas multíparas.