Un productor de Buenos Aires, logró cambiar su experiencia de pérdida del año 2022 gracias a la decisión de asegurar el trigo. De esta forma, no solo lo ayudó a mejorar el panorama financiero hasta la gruesa; sino que además tuvo una rentabilidad del 16%.
Esto se llevó a cabo gracias al asesoramiento del Grupo Cencerro quienes lograron contemplar el contexto actual y analizar los posibles escenarios que se podían presentar en el futuro; de forma tal de nivelar expectativas y minimizar riesgos.
Mario, es un productor del norte de la provincia de Bs As, quien gracias a hacer gestión económica financiera y tomar precauciones evitó encontrarse con un panorama muy complejo, si se contempla que viene de una campaña 2022-2023 muy negativa.
Con lo obtenido del seguro el productor pudo afrontar todos los gastos productivos sin considerar el costo de la tierra y obtuvo además un ingreso adicional
Desde mediado del 2020 trabajo con el grupo en el armado de presupuestos y control de gestión en Excel para lo que fue la primera campaña; pero luego pasaron a llevar toda la administración en un sistema de gestión.
La empresa está conformada por tres campos y una oficina en CABA, por lo tanto, se encuentra repartida la carga de información. De esto surge la necesidad de contar en los cuatro sitios con personal capacitado para alimentar la herramienta.
Dos de sus tres explotaciones son mixtas y es en ellas en las que sufrió durante 2023 el mismo siniestro de heladas que lo perjudicó en 2022 con respecto al cultivo de trigo. En ambos años perdió el 90% de lo producido.
Nueva apuesta
En primer lugar, cabe destacar que el año no habían asegurado porque entendían que la zona comúnmente no sufría este inconveniente. Sin embargo, ya con la experiencia de los años anteriores, en 2023 decidieron asegurar, luego del asesoramiento y análisis de los márgenes presupuestados del cultivo con y sin seguro.
Lo que sucedió en 2022 implicó una gran pérdida para la empresa, que tuvo que afrontar los gastos de producción y no contó con ningún ingreso por compensación de seguro. A esto, se le sumó que la campaña en general tuvo resultados muy malos, tanto la fina como la gruesa.
Con el seguro que apostó en 2023, la empresa pudo obtener ingresos que ayudaron a mejorar el panorama desde lo financiero al menos hasta la gruesa, la cual se comenzó a sembrar en estos últimos días con buenas condiciones ya que las precipitaciones hasta el momento parecen colaborar.
Con lo obtenido del seguro el productor pudo afrontar todos los gastos productivos sin considerar el costo de la tierra y obtuvo además un ingreso adicional. El contexto luego de dos muy malas campañas sin contar con una cobertura sería notablemente comprometido desde lo financiero para la empresa. El flujo de fondos salteó complicaciones con ese ingreso. La empresa ganó previsibilidad y tranquilidad.