En una exposición de no más de 10 minutos en el marco de CIVA 2022, Margarita Briceño, responsable del equipo de Marketing y socia en Asociación de Ideas, aportó claridad sobre una temática sobre la cual ha tenido experiencia reciente, como lo es la gestión de equipos de trabajo a la distancia.
Margarita inició con la pregunta: ¿se pueden sostener equipos ágiles a la distancia? Dejando en claro un tema: luego de la Pandemia, la manera de trabajar se ha modificado, trayendo con sí metodologías de trabajo más ágiles y eficientes.
“Cuando incorporé la distancia forzada, gané mucha agilidad” fue una de las premisas en su charla. Además, afirmó que la distancia la ayudó a ponerse en orden y a respetar las herramientas de gestión y comunicación que ya venía usando, pero de manera incipiente.
Hasta antes de la Pandemia, el trabajo era volátil, incierto y un tanto ambiguo. Ahora no es lineal, es frágil y algunas veces incomprensible planteando la pregunta de ¿ahora cómo planeo?
Lo primero es tener en claro los principios y valores del equipo, pues esto otorga buenas prácticas de trabajo. Ya que es un cambio de cultura, “los valores de la empresa son los que vamos reforzando” indicó Margarita.
Esto se genera al momento en que por estar a la distancia se debe confiar en el equipo, en la autogestión, autoorganización y en la disciplina.
Para manejar un equipo a la distancia de manera ágil se deben incorporar herramientas de comunicación y gestión como plataformas de reuniones virtuales como Meet, Zoom o Skype; plataformas de gestión como Kanban o Asana; chat virtual por Whatsapp y el correo electrónico. Además, se deben implementar reuniones diarias donde se generan acuerdos entre el equipo.
Pero ¿cómo implementar la agilidad en el equipo?
Para ello lo primero es comprender que la agilidad es la habilidad de moverse y cambiar de dirección de forma rápida y con destreza. Es por eso que se deben plantear ciclos simples con productos intermedios hasta llegar al producto final que estamos buscando. Es como dice Margarita Briceño, el Corazón de la agilidad: colabora, entrega, reflexiona y mejora, “el feedback es pronto, no nos esperamos a terminar todo, se hace en ciclos simples, no tenemos productos finales, si no devoluciones cortas y ágiles” indicó.
Ya que el mercado de hoy en día es más dinámico, una reunión al iniciar el día (“Daily”), no puede faltar.
Con ella se consigue una brújula que marca el destino y genera una dirección, posibilitando realizar las correcciones necesarias lo más pronto posible. También se debe hacer una reunión al iniciar un proyecto para planificar, una de revisión pasadas dos semanas y una reunión final, haciendo una retrospectiva de lo que se hizo, cómo se hizo, que salió bien y qué se puede mejorar.
Teniendo en cuenta que el trabajo a la distancia puede hacerse híbrido o remoto es importante generar lazos entre el equipo. Es por eso que según Margarita, ella misma en su equipo de trabajo teje nexos que superan las barreras típicamente profesionales, motivando a su equipo a conectarse humanamente.
Para finalizar y entendiendo que el grupo de trabajo se autogestiona, es imprescindible permitir que cada persona muestre sus avances y que defina con qué puede comprometerse.
“Es generar espacios de confianza pues, entre todos, podemos ayudarnos”, cerró Margarita Briceño.
