Hoy el mundo está combatiendo el impacto de la irrupción del COVID 19, impacto que está concientizando sobre la importancia de la estandarización y la trazabilidad para poder hacer un seguimiento efectivo de los casos detectados y de cualquier insumo o dispositivo médico utilizado en los protocolos de salud.
Alejandro Rodríguez, Gerente General de GS1 Argentina, aseguró que la identificación de quienes viajaron desde el exterior hacia nuestro país, ya sea residentes o turistas, fue esencial a la hora de detectar los primeros casos, porque permitió conocer si esos casos fueron importados o contagiados por proximidad con un infectado.
En tal sentido se trabajó minuto a minuto desde el primer día requiriendo declaraciones juradas, poniendo a disposición servicios como el del SAME, determinando aislamientos o informando desde todos los medios de comunicación existentes qué medidas y cuidados debe tener cada ciudadano de cualquier lugar del país.
De todas formas, según Rodríguez, hoy que la pandemia avanza, los controles se ajustan y no pueden resultar pocos, sobre todo cuando se conoce lo que sucede en aquellos puntos del globo donde se actuó tarde. El movimiento de las personas y sus círculos de contacto debe ser cada vez más minucioso, y también la trazabilidad del material utilizado por el sector de la salud y por el de seguridad que trabaja en las calles.
La trazabilidad de medicamentos y material de uso sanitario, está basado en la identificación de cada unidad, y también en la de las ubicaciones dentro de las plantas de producción, “para lo que el camino más seguro es el de la utilización de sistemas estándares que permitan seguridad en los datos informados, así como también en la administración del stock existente, indispensable para un rápido suministro”, sostuvo el gerente de GS1 Argentina.
La Organización Mundial de la Salud desarrolló listas de productos médicos prioritarios para “procedimientos específicos de prevención, diagnóstico, tratamiento o rehabilitación llevados a cabo en la mayoría de los centros de atención médica”, cuya trazabilidad implica seguridad a la hora de su utilización. Rodríguez declaró que con la utilización de un identificador estándar en la industria, es más fácil administrar los datos y alcanzar una mejor visibilidad.
Según un reciente informe de Interpol del 19 de marzo, el brote de coronavirus no quedó exento de la circulación de artículos médicos falsificados. “En circulación en el mundo se incautaron barbijos falsificados, desinfectantes de manos de baja calidad, y medicamentos antivirales no autorizados. A partir de esto, más de 90 países participan en acciones colectivas contra “esta práctica” que debemos alertar”.