Así lo sostuvo el Ing. Agr. Ariel Monje a lo largo de la última jornada de intercambio veterinario realizada por el Grupo Intervet Sudeste, en Balcarce.
Para continuar, suscribite a Motivar. Si ya sos un usuario suscripto, iniciá sesión.
SUSCRIBITEAsí lo sostuvo el Ing. Agr. Ariel Monje a lo largo de la última jornada de intercambio veterinario realizada por el Grupo Intervet Sudeste, en Balcarce.
Dialogar con los profesionales de la actividad privada, acompañarlos al campo y asistir a sus puntos de encuentro ha sido (y seguirá siendo) la mejor manera que desde este Periódico MOTIVAR encontramos para mantenernos al tanto de la realidad que vive la producción ganadera en las distintas regiones de nuestro país.
En ese marco, participamos de la última jornada de intercambio veterinario realizada en la localidad bonaerense de Balcarce, cuya organización estuvo a cargo del Grupo Intervet Sudeste y contó con disertaciones a cargo de Ariel Monje (Máster en Producción Animal) y Guillermo Bavera (ex director de Producción Animal de la Facultad de Agronomía y Veterinaria de Río Cuarto).
«Estos encuentros técnicos son realmente interesantes frente a la realidad de un veterinario rural que -a nivel general- se caracteriza por trabajar de manera aislada», nos comentaba la Dra. Marcela Boullón, presidenta del Grupo formado allá por 1997 y que hoy cuenta con 15 integrantes, los cuales se desempeñan en el sudeste de la provincia de Buenos Aires.
«Algunos de ellos poseen veterinarias privadas y otros son sólo asesores. Nos reunimos todos los meses y llevamos adelante actualizaciones ligadas a las áreas en las que nos desempeñamos: cría, invernada, cabaña, tambo y laboratorio de diagnóstico», sostuvo la especialista.
Otro de los integrantes del Intervet Sudeste es el médico veterinario Jorge Spinelli, quien resaltó el hecho de que a los encuentros de los terceros lunes de cada mes se hayan sumado profesionales jóvenes, que si bien están comenzando en la actividad, mantienen vigente el espíritu del grupo. «Contamos con la participación de veterinarios radicados en Maipú, Azul, Tandil, Lobería, San Manuel, Balcarce, Mar del Plata y Necochea. En conjunto, brindamos asesoramiento a más de 120 mil cabezas, contemplando solamente al ganado de carne», resaltó Spinelli.
A su vez, el profesional dio su visión sobre la problemática sanitaria de la provincia: «Desde el punto de vista clínico, la hipomagnesemia ha sido en los últimos años uno de los principales inconvenientes, sumada a los casos de paratuberculosis y tuberculosis, que cada vez se hacen más frecuentes. Lamentablemente, hablamos de los mismos temas… siempre».
Respecto de esto, la Dra. Boullón sostuvo que -para el caso de las enfermedades venéreas- la situación es distinta, «habiéndose manifestado una reducción en la tasa de infección, en comparación con años atrás». Según la entrevistada, esta misma situación ocurrió, por ejemplo, en el caso de la brucelosis bovina.
Alentador fue también escuchar a los profesionales sostener que el año 2012 fue bueno en cuanto a una mayor oferta laboral y explicar que, más allá del perfil tradicional de los productores en lo que hace a la inversión en tecnología, «el hecho que la agricultura haya avanzado tanto y la vaca quedara en los peores lugares del campo, ha agudizado el intelecto de los productores».
En este sentido, Boullón agregó: «La conjunción entre esa situación y los precios de la hacienda, hace que los productores requieran de más servicios veterinarios. Ya después es un tema de cada profesional ver cómo se introduce en los establecimientos».
A lo largo de la jornada propiamente dicha, se llevaron adelante una serie de disertaciones (Ver recuadro) entre las cuales destacamos una de las dictadas por el Ing. Agr. Ariel Monje, denominada: «Integración de sistemas intensivos ganaderos asociados a la expansión agrícola». En ese marco, el asesor privado dedicó unos minutos para transmitirle a los presentes algunos conceptos generales: «Estamos haciendo una ganadería diferente. En el NEA, por ejemplo, si las empresas no hacen una reconversión profunda, la actividad seguirá perdiendo influencia en la ocupación de las tierras. Si nos quedamos con los esquemas clásicos, convencionales e ineficientes, realmente el desplazamiento puede ser mayor. Tenemos toda la tecnología; el tema es incorporarla», sostuvo.
Reforzando el concepto ligado a una ganadería asociada a la agricultura, Monje explicó que: «Si hay un cambio de escenario, hay que cambiar».
Para ello, el profesional propuso un modelo en el cual se reconozca que las categorías productivas de la cría bovina son realmente pocas. «Un campo no puede darse el lujo de producir un ternero macho cada 12 hectáreas, mandar todas las terneras a reposición y vender casi todas las vacas, flacas. Por eso debemos generar una cría que produzca una gran cantidad de terneros por unidad de superficie». Y continuó su exposición: «En lugar de tener un ternero de 180 kilos al pie de la madre cada cinco hectáreas, tenemos que lograr tres o cuatro terneritos -de 50 o 60 kilos- por hectárea. Lo que nos tiene que interesar es el ternero». A la vez y en caso que el sistema esté integrado a uno de invernada, «podemos aprovechar para producir carne de calidad o un ternero de 250 kilos que después ingrese a un feed lot o a un encierra ya sabiendo comer. Clave será también que no salga del campo ninguna vaca flaca. Y si es posible, mandar la vaca de cría al frigorífico con no más de cinco años de edad», concluyó Monje frente a los asistentes.
Más allá de esto y de sostener, entre otras cosas, que: «en condiciones normales, el que no tiene un 90% de preñez en su rodeo es porque no quiere», el profesional fuertemente vinculado con la expansión del destete precoz en nuestro país se refirió puntualmente a la situación del Norte argentino.
«Lo importante allí es agregarle valor carnicero real a la vaca de descarte y mejorar los terneros para la venta, generando una categoría de terneros diferente, que sepa aprovechar raciones concentradas en piquetes o en corrales», explicó.
Si bien la disertación completa de Ariel Monje se encuentra ya disponible en hablandodelonuestro.com.ar, vale destacar sus comentarios respecto de las ventajas del destete precoz sistemático.
«Implementándolo, se puede manejar el pastizal natural, con un 50% más de carga en vientres». Frente a esto, compartió resultados logrados por el CREA Curuzú Cuatiá (Corrientes), en los cuales se demuestra haber logrado más del 70% de preñez por unidad de superficie, aumentando la carga en un 50%.
«Esto genera preñeces altas todos los años y, además, una mayor cantidad de terneros por unidad de superficie. En base a esta estrategia ya están funcionando esquemas de cría de alta especialización en los cuales existen sólo dos categorías: las vacas adultas y el inseminador», concluyó el disertante.
Además de la charla a la cual se hizo referencia en el artículo central, Ariel Monje se refirió a los «Esquemas de invernada intensiva no contaminantes, desarrollo de feedlots ecológicos».
Posteriormente, el veterinario Guillermo Bavera abordó dos temas específicos: «Suplementación del bovino a pastoreo» y «Aguas de bebida para ganado».
Respecto de este último, Bavera compartió aspectos a tener en cuenta:
¢ El alimento más importante de los bovinos es el agua.
¢ El agua debe ir al animal y no al revés.
¢ Su disponibilidad permanente aumenta la producción.
¢ Un campo ganadero sin agua es inútil.
¢ La inversión puede ser alta, pero hace la producción eficiente y aumenta el valor del campo.
¢ El análisis de agua es imprescindible para efectuar una correcta suplementación mineral.
Las disertaciones que tuvieron lugar en la jornada realizada por el Grupo Intervet Sudeste están ya disponibles en: hablandodelonuestro.com.ar.
Ingresá a la Web y accedé a las mismas desde la sección «Charlas y Congresos» o escribiendo el nombre de alguno de los disertantes en el «Buscador» que se encuentra allí presente.