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SUSCRIBITELa tendencia sigue su camino. El crecimiento en la adopción de tecnologías destinadas a la prevención de enfermedades en los bovinos avanza y lo seguirá haciendo de la mano del asesoramiento y la promoción. Juntas, estas actividades refuerzan la tarea de concientización a realizar entre productores para estimular la incorporación de planes sanitarios productivos.
Los laboratorios veterinarios tomaron nota de esta realidad y se encuentran consolidando cuadros técnicos con el objetivo de brindar soporte a campo a sus clientes veterinarios. «Nunca perdemos de vista que es el profesional quien debe indicar y comercializar los productos, pero es clave también apoyarlos en la promoción de líneas que, por ejemplo en el caso de los biológicos, y sin dejar atrás las vacunas tradicionales, comienzan a volcarse hacia los complejos reproductivos y respiratorios», comentó el gerente comercial de Centro Diagnóstico Veterinario, Juan Roo.
Interesante fue escuchar la devolución de Juan Roo frente a comentarios que se sucedieron y que vinculaban a Centro Diagnóstico Veterinario en una operación de venta a manos de una compañía multinacional. «Desde que llegué a la compañía -en 2009- se han dicho muchas cosas. A pesar de ello, nuestro posicionamiento sigue creciendo tanto en el mercado interno como en el exterior. Pertenecemos a un grupo comprometido con el país. Decidimos no salir a
desmentir estos rumores puesto que quizás vengan de algún lado que pretenda perjudicar a la empresa».
Además, agregó: «Este año vamos a producir un 30% más de dosis para abastecer al mercado interno y superar los 15 millones de dosis para exportación. Consideramos que entre 12 y 15 millones de animales serían los que en la actualidad reciben un plan sanitario preventivo completo. Todavía tenemos mucho trabajo por hacer».
Ya culminado el proceso por el pasó a formar parte del grupo Mathiesen -de capitales europeos, con sede central en Chile- y habiendo recuperado unos 7% de participación de mercado, la empresa ha crecido cerca de un 60% interanualmente en dosis e inclusive un porcentaje mayor en facturación, en base al reacomodamiento de los precios.
«Apuntamos los esfuerzos en realizar encuentros con veterinarios y ganaderos, a fin de demostrar cuánto dinero se deja de ganar en la actividad. Hay que seguir mostrándole al productor el impacto de una buena sanidad sobre su rentabilidad», explicó el directivo, al tiempo que graficó: «Según datos de Caprove, se pierden $8.000 millones por no prevenir las enfermedades».
Esta interacción, también le ha permitido a CDV analizar los distintos perfiles con los que se encuentran los profesionales. «Todavía sigue existiendo un grupo de ganaderos que descree del aporte de las tecnologías (y sus resultados productivos son acordes con esa visión). En este caso, algunos son los veterinarios que siguen insistiendo en cambiar el paradigma, mientras que otros van perdiendo fuerzas, frente a la resistencia que se les plantea. Luego nos encontramos con productores tecnificados que trabajan con asesoramiento profesional, quienes comprenden la importancia de la sanidad y logran excelentes resultados. En el medio, se ubica una importante masa que va incorporando el mensaje. Hace unos años no nos escuchaban y hoy sí lo hacen», comentó Roo.
En la actualidad, CDV es uno de los dos laboratorios que tiene registrada una vacuna pentavalente (de 0,1ml con fracción virus ISA) que se exporta casi en su totalidad para ser aplicada en salmones en el país vecino de Chile.
Más allá de esto y en lo que hace a la elaboración de vacuna antiaftosa, Juan Roo sostuvo que: «Estamos realizando todas las adecuaciones necesarias para finalmente lograr continuidad en la provisión del producto. En el corto plazo presentaremos lotes a registro, a fin de lograr una cantidad de dosis que nos permita abastecer la demanda de nuestros clientes locales y del exterior». Por último y al ser consultado respecto del ingreso al país de una vacuna brasileña, Roo comentó: «Todo lo que sea competencia bien controlada puede aportar a una mejor oferta para productores y veterinarios. Estamos expectantes frente a lo que pueda ocurrir: seguimos muy retrasados en el precio de los biológicos, con lo cual no sería bueno que la competencia en el rubro se plantee únicamente por esta variable».
El gran desafío apunta a lograr la concientización respecto de la importancia del asesoramiento y la inversión en sanidad, más allá de los buenos precios que hoy existen. «Esto es clave, desde la empresa ofrecemos nuestro equipo técnico a los clientes veterinarios para ir juntos a los campos. El hecho de contar con uno de los laboratorios de diagnóstico más reconocidos del país nos permite anticiparnos a qué es lo que está ocurriendo y dar apoyo en ese sentido.
Realizamos un seguimiento de las medidas adoptadas para presentar informes en donde se demuestran las mejoras logradas y eso no tiene que ver con el precio de la hacienda. Si bien pretendemos más, existe una mayor toma de conciencia sobre estos temas», agregó Juan Roo, mientras destacaba: «No realizamos un trabajo de venta sino de apoyo en la difusión de toda la tecnología que hay detrás de un biológico».
En este sentido, la empresa se encuentra lanzando un impreso «Esquema Sanitario Básico», en el cual se incluye un plan sanitario e instrucciones para el correcto manejo de la hacienda y las vacunas que se aplican. Además, se está trabajando en mejorar el servicio de pos venta. «Es clave que la industria escuche las necesidades de los veterinarios y los productores que utilizan los productos.
Estamos avanzando en este sentido, siempre de la mano de los profesionales», concluyó nuestro entrevistado.