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SUSCRIBITEMientras los medios masivos de comunicación vertían diversas opiniones sobre los nombramientos de Jorge Capitanich (jefe de Gabinete) y Axel Kicillof (ministro de Economía), el sector rural recibía con una silenciosa expectativa el nombramiento de Carlos Casamiquela al frente del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación; expectativa que se hizo aún más carente de críticas tras la renuncia del ex secretario de Comercio, Guillermo Moreno.
Horas más tarde, el pasado 20 de noviembre, este Periódico MOTIVAR sostenía a través de su cuenta de Twitter (@pmotivar): «Es factible que, tras la designación de Casamiquela se produzcan cambios en el Senasa»… Cambios que no tardaron en llegar: Diana Guillén (presidenta) y Luis Carné (vice) reemplazaron en la conducción del organismo sanitario a Marcelo Miguez y José María Romero.
Esta fue la primera medida formal que tomó al frente del Ministerio el, hasta ese entonces, presidente del INTA; a la cual se sumó el pedido de renuncia a todos los secretarios y subsecretarios de la gestión Yahuar: Haroldo Lebed y Lorenzo Basso dejaron de formar parte del organismo, mientras que otros podrían seguir sus pasos.
Un dato interesante tiene que ver con la reaparición en la escena política de Jorge Amaya, ex presidente del Senasa y de muy buen trato con Carlos Casamiquela, con quien, inclusive, compartió la conducción del ente desde el año 2003 hasta 2009.
Si bien al momento de cierre de esta edición no se había confirmado que Amaya fuera nombrado con algún cargo particular en el Ministerio, vale preguntarse si su opinión no habrá sido al menos tenida en cuenta a la hora de designar a Diana Guillen, como presidenta de un Senasa al cual conoce bien, no sólo por haber sido directora nacional de protección vegetal de 1992 a 2008, sino también por haber asumido ese año como gerenta general del Servicio, posición en la cual se desempeñó hasta 2012, momento en el cual se alejó de la gestión de Marcelo Miguez.
El Senasa colaborará en un estudio de diagnóstico sobre enfermedades reproductivas en rodeos de cría, circunscrito al departamento santafesino de Garay. En este sentido, proveerá de registros, participará en reuniones con veterinarios zonales y pondrá a disposición el laboratorio regional Santa Fe para evaluación de muestras. A esta iniciativa se sumará la Facultad de Ciencias Veterinarias de la Universidad Nacional del Litoral.
Además y en conjunto con el INTA se trabajará en un plan de capacitación para pequeños productores de granjas del conurbano santafesino, que incluirá buenas prácticas agrícolas y normas higiénico – sanitarias.
Como fuere, es claro que el Senasa reflota ese viejo anhelo de ser conducido por funcionarios con carrera propia dentro del organismo. Y esto también involucra a su nuevo vicepresidente, el médico veterinario Luis Carné, quien se desempeñaba como director de la regional San Luis – La Pampa, con una gestión destacada por un fuerte trabajo interinstitucional y diálogo permanente entre el organismo, las provincias, los productores y los profesionales.
Ingeniero agrónomo, rionegrino, con pasado en el Senasa y una ordenada gestión como presidente del INTA desde 2009, Carlos Casamiquela es un funcionario perteneciente al Frente para la Victoria desde la primera hora, trabajando en los últimos años para consolidar líneas de gestión vinculadas con la innovación como síntesis del desarrollo territorial y la investigación.
¿Algunos logros del Instituto durante su mandato? Desde la secuenciación de los genomas de la papa, el tomate, moha, trigo y girasol hasta la primera ternera clonada bitransgénica del mundo -Rosita-, pasando por la vacuna Bio Jaja contra la tristeza bovina y la recuperación de la memoria institucional durante la década del ´70…