» La tendencia cambia: ya no hay que lucir como mujer y actuar como hombre para triunfar en las organizaciones.
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SUSCRIBITE» La tendencia cambia: ya no hay que lucir como mujer y actuar como hombre para triunfar en las organizaciones.
Por Andrea Consolini |
No cabe duda que la sociedad argentina es una de las más machistas y regidas por estereotipos en el mundo. Este contexto no es precisamente alentador para el desarrollo de la carrera profesional de la mujer, donde los preconceptos son: «si es bonita es hueca»; «si es madre no puede poner el mismo empeño y dedicación en su trabajo» y «si tiene carácter y logra imponer sus ideas, ¡tiene que ser soltera y en lo personal debe ser inaguantable!»
Entrando en la ficción, en la tira «La Lola», que se televisó en 2007 y 2008, nos vimos representadas. Más allá de las exageraciones, Lola era una excelente y autoexigente profesional que contaba con recursos más que suficientes para ocupar el puesto de directora; sin embargo, más de una vez se encontró expuesta a situaciones humillantes por el hecho de ser mujer en un puesto directivo. Allí se planteaba si tenía que actuar como hombre o como mujer para ganarse el respeto de sus compañeros y lograr sus objetivos como líder.
Saliendo de la ficción, en mis primeros años en la Facultad de Ingeniería, un profesor de Física hizo que mi examen final fuese interminable, tratando de buscar ejercicios que no pudiera resolver y cuando se rindió a pedirme la libreta para poner la nota de aprobación, no aguantó preguntar «señorita, ¿a qué viene usted a esta Facultad si las mujeres sólo piensan en el matrimonio…?» Indignada le contesté, «es que en esta Facultad la relación entre hombres y mujeres es de 100 a 10, por lo que tengo más chance de conseguir novio y casarme…»
Definitivamente las mujeres no tenemos que actuar como hombres para lograr respeto o para que nos consideren en igualdad de condiciones. Tenemos habilidades diferentes a las que poseen los hombres y justamente cuando se conjugan en un equipo directivo, es cuando sale a la luz lo mejor de cada uno.
El hombre, por lo general, es directo y analítico. La mujer es más persuasiva tanto para la comunicación como para la acción. Suele ser conservadora para tomar decisiones y comprensiva para resolver conflictos. Somos complementarios.
Considero que aquello que se debe modificar es la actitud para ser valoradas como un todo y no renunciar a nada para lograr nuestros objetivos.
A lo largo de mi trayectoria profesional en diferentes empresas, vi a muchas colegas sufrir su condición de mujer. Casos donde el «Techo de Cristal», pasaba a ser de hormigón armado porque era muy evidente la inequidad de oportunidades. Y lo más llamativo es que en todos los casos eran mujeres muy capacitadas y preparadas para las posiciones que ocupaban.
Sin embargo, las empresas que apuestan a la diversidad tienen todo para ganar, porque comprenden que los equipos más productivos y creativos son los mixtos en cualquier nivel de la organización…
¿Cómo contribuir al cambio?
¢ Tomar una actitud positiva y de liderazgo activo. Escuchar y también proponer ideas. Hay que buscar el mensaje y el canal correctos, para lo cual es necesario conocer cómo se maneja la organización.
¢ No tenemos que actuar masculinamente o reprimir nuestros sentimientos para infundir respeto y liderazgo, se termina volviendo en contra y en una postura que no se puede mantener a largo plazo.
¿Y las empresas que quieran tener mujeres ejecutivas?
¢ Promover el teletrabajo y/o el trabajo part-time para mujeres como una opción, donde la remuneración sea acorde a la contribución a la empresa.
¢ Procurar que los equipos de trabajo sean mixtos, beneficiándose con la diversidad de opiniones y criterios para resolver situaciones; y obteniendo la creatividad para proponer ideas y proyectos que mejoren los resultados.
¢ Adecuar al contexto local los programas de diversidad y liderazgo femenino, especialmente para las multinacionales que reciben este mandato desde su casa matriz.
¢ Un diagnóstico adecuado y la implementación de un programa que realmente lleve a mejorar el clima de trabajo generando igualdad de oportunidades, convertirá a la empresa en el mejor lugar para trabajar.
» Las mujeres han logrado avanzar no sólo en el trabajo profesional a campo sino también en el ámbito de la industria, ocupando hoy importantes cargos.
De la redacción de MOTIVAR |
Con presencia en las áreas técnicas y de registro, pero también en los sectores de marketing, promoción y ventas, las mujeres avanzan en la industria de laboratorios veterinarios, logrando puestos gerenciales en empresas nacionales y multinacionales.
Si bien es interesante destacar la escalada en los cargos ejecutivos, resulta igualmente importante reconocer el toque distintivo que las empresarias demuestran a la hora de llevar adelante negociaciones, trazar estrategias o definir oportunidades en un mercado tradicionalmente dominado por los hombres.
No quedan dudas que en los últimos años el sector empresarial comprendió la importancia de generar equipos de trabajo «mixtos» en los cuales la competencia por los puestos laborales tiene que ver pura y exclusivamente con las capacidades de las personas y no con su sexo.
Veterinarias argentinas
Tal como se demostró en el último Censo de la profesión veterinaria publicado en la edición de noviembre de 2010 del Periódico MOTIVAR, desde hace unos años las mujeres muestran un avance en la actividad profesional.
Se evidencia una más que interesante presencia, fundamentalmente en el rubro de los animales de compañía.
En este sentido, el informe demostró que de los 18.524 veterinarios que existen en Argentina, el 67.4% serían hombres (12.496) y el 32.6% restante, mujeres.
Un dato más que interesante, sobre todo a la hora de analizar el perfil actual del veterinario argentino.
Positivo también ha sido poder determinar una suerte de ranking en el cual se aprecia con mayor claridad cuáles son las provincias en las cuales la participación de las médicas veterinarias es mayor.
Allí se pudo ver cómo en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, el 46% de los matriculados activos del Consejo Profesional son mujeres y una situación prácticamente similar se vive en Neuquén. Este dato también es interesante en la provincia de Buenos Aires, aunque allí el número se aproximaría al 40%.
Por si quedan dudas respecto del lugar que ocuparán las profesionales en el futuro, sólo un dato más: se estima que cerca del 70% de los futuros egresados de la Facultad de Ciencias Veterinarias de la UBA, serán mujeres.