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Carga de glucógeno y estrategias similares

Ya que los carbohidratos se vuelven cada vez más importantes como un combustible para el ejercicio muscular conforme la intensidad del ejercicio aumenta, y debido a que la cantidad de carbohidratos almacenados en el cuerpo es limitada, la reducción de glucógeno muscular y hepático puede ser un factor que limite la capacidad de desempeño en eventos de distancia caracterizados por niveles altos de gasto de energía durante períodos prolongados.
2 de septiembre de 2013 - 17:27

Senasa La carga de carbohidratos, también llamada carga de glucógeno y supercompensación de glucógeno, es una técnica dietética diseñada para promover un aumento significativo en el contenido de glucógeno en el hígado y los músculos en un intento por retrasar la presentación de fatiga. Generalmente se usa durante tres a siete días en preparación para competencias atléticas mayores.

Se ha recomendado que en caballos que realizan ejercicio sub máximo dos horas antes de empezar la prueba se les suministre una alimentación rica en glucógeno, y esto se repita cada dos horas. Cuando a los caballos se les suplementa con carbohidratos, tardan 1 ½ a 2 horas en llegar a los niveles más altos de glucosa en sangre. No obstante, si se alimentan con una comida basándose en grano, cargada con carbohidratos, se podría inducir a hipoglucemia con el consiguiente riesgo de falta de rendimiento. La respuesta del cuerpo a esta hipoglucemia es porque la insulina conduce a la glucosa dentro de las células, haciéndola menos disponible en sangre circulante y en los tejidos. Pero hay que procurar no exceder la carga de carbohidratos ya que un incremento excesivo del glucógeno en el cuerpo puede aumentar el riesgo de sufrir laminitis.

En la práctica, para aumentar la energía de una ración sin caer en los riesgos anteriormente descritos, se utiliza la suplementación con aceites de origen vegetal. Esta suplementación se hace de forma progresiva en los periodos que preceden a la temporada de competición. En Pegaso (aceites de chía muy ricos en Omega 3) recomendamos comenzar con la administración de 150 ml. repartidos en las tres raciones diarias, hasta llegar a la administración de 400ml. diarios (máx. 600) dependiendo de que sea bien tolerado por el animal. Este tipo de alimentación debe iniciarse unos dos meses antes de la competición y suprimirla dos días antes de la misma. De esta forma, se fuerza un mayor predominio del metabolismo lipídico en contraposición al metabolismo glucídico, logrando una menor producción de lactato y menor depleción de glicógeno, factores ambos que están implicados en la aparición de fatiga muscular.

Durante la recuperación la mejor estrategia para reponer energía es alimentar al caballo con una dieta alta en fibra.

L-Carnitina

La L-Carnitina es una sustancia que se les da a los caballos para promover su rendimiento. Es una sustancia de bajo peso molecular, encontrada en tejidos de planta y animales a la que incorrectamente se le ha encuadrado como aminoácido. Se encuentra en la membrana de la mitocondria y es la responsable de que la mitocondria capte los ácidos grasos libres y metabolice las grasas durante el ejercicio sub máximo. Un trabajo reciente presentado en la 6ª Conferencia Internacional de Fisiología del Ejercicio celebrada en Kentucky (USA), demuestra que una suplementación continua de L-Carnitina, a razón de 10 gr/día de L-Carnitina durante 10 semanas, aumenta la proporción de fibras tipo IIA así como el contenido de glucógeno muscular, lo que supone un efecto favorecedor del metabolismo aeróbico.

Por estas razones incluímos en nuestro aceite extra energético la L-Carnitina, para potenciar el efecto mejorador de la performance de los equinos deportivos de alta competencia.

 

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